El test Almagro, como lo habían bautizado en el entorno de Rafael Nadal, acabó con buena nota para el campeón de Roland Garros. En dos horas y 20 minutos, el tenista mallorquín se clasificó para la tercera ronda del único Grand Slam del año en tierra batida tras imponerse a Nicolás Almagro por 6-4, 6-3 y 6-1. Fue la victoria número 68 del mallorquín en París (contra una sola derrota, en el 2009) y la cuarta ante el jugador murciano, actualmente número 154 del mundo y en periodo de recuperación después de una fascitis plantar que le mantuvo seis meses parado desde que se retiró el año pasado en París.

Nadal salió muy concentrado para afrontar la prueba real de su momento de forma ante un tenista duro y de potencia como Almagro, que le había derrotado solo en una ocasión de 13, el año pasado en Barcelona, pero que puede complicar la vida a cualquiera.

"Estoy muy feliz de cómo he jugado. Me he sentido muy sólido y esta victoria era muy importante. Jugar así otra vez en la pista central de Roland Garros es muy especial para mí", explicó sobre la misma pista el nueve veces campeón del torneo. El próximo rival de Nadal, mañana, será Andrei Kuznetsov, 120 del mundo.

También está ya en tercera ronda el número uno del mundo, Novak Djokovic, que superó en tres sets al luxemburgués Gilles Muller, por 6-1, 6-4 y 6-4, en un partido marcado por los problemas físicos que obligaron al serbio a ser tratado sobre la pista.

"He resbalado mucho en el partido y he sentido un poco de dolor en la pierna derecha, pero no es algo que me asuste", dijo al final del encuentro.

Otro español en tercera ronda será Pablo Andújar, que remontó el duelo ante Philipp Kohlschreiber (6-1, 7-6(5), 3-6, 3-6 y 6-4).