La semana que se inicia es clave para el futuro del baloncesto de élite en Cáceres. Todos se posicionan en un complejo teatro de operaciones con un buen puñado de nombres no siempre concordantes entre sí.

Lázaro García

A instancias de su alcalde, José María Saponi, y con cierto retraso, el concejal de Deportes ha impulsado un arreglo para lo que parecía sentenciado, pero se encuentra con un tiempo de escasa bonanza económica en el ayuntamiento.

Felipe Fernández

El aún presidente verdinegro ha reiterado que la prioridad es que la plaza LEB se quede en la ciudad. Sin embargo, el club exige que lo haga con todas las garantías. No quiere pasar a la historia como el hombre que vendió, pero tampoco desea que se le menosprecie.

Julio Espino

El gerente del Cáceres es seguramente más radical en sus propuestas, un gestor capaz de ejecutar cualquier decisión por impopular que resulte y acostumbrado a la presión desde sus tiempos sindicales. Su camino está aparejado por el momento con el de Felipe Fernández.

Pedro Núñez

El y su grupo --Chacón, Abelardo Martín y Alvarado-- están donde deseaban: la afición que pidió su salida cuando dijeron hace tres años que había que vender la plaza ACB les ruega que vuelvan. Experiencia y solvencia económica, sus poderes.

Angel de Pablos

A Núñez no le gustó del todo en su día el protagonismo que suponía ser presidente, así es que ha encontrado a De Pablos, máximo dirigente del club alternativo de la ciudad, el Ceres. Hombre mesurado y héroe del histórico 10 de mayo del 92.

Héctor Jiménez

Gerente en los años de penuria económica en la ACB, desde que fue despedido en el 2002 ha ampliado su conocimiento del baloncesto representando a jugadores. Sus relaciones con el Cáceres son pésimas tras varios juicios. Ahora volvería al sillón que dejó.

Ñete Bohigas

Tiene la rara habilidad de llevarse bien con los dos bandos. Por supuesto sería el entrenador deseado por la nueva directiva, pero no está claro que lo aceptase. Su momento para coger un grande de la LEB es ahora y León es su opción más fuerte.

´Piti´ Hurtado

En caso de que Bohigas no siguiese se buscaría entrenador. Quizás la LEB sería un toro demasiado duro para un hombre de la casa bien visto en la familia entrante.

Mario Madejón

Sería el otro candidato cacereño al banquillo. Su experiencia en Algeciras durante dos temporadas ha resultado positiva y estaría encantado de volver.

Juan Pablo Márquez

Su trabajo como ayudante de Bohigas ha resultado intachable este año, pero tendría muy complicado seguir si hay cambios.