De no haber sido por el rifi-rafe protagonizado por el expresidente Pedro Nieto con la presidencia de la asamblea, las dos juntas generales de accionistas que celebró en la noche de ayer el Extremadura SAD habrían pasado a la historia por su brevedad. En apenas 22 minutos se despacharon tanto el orden del día de la asamblea ordinaria, que finalmente fue impugnada por Nieto, como el de la extraordinaria. La aprobación de todos los puntos de forma mayoritaria, incluso inánime, fue la nota más destacada junto a la impugnación que hizo el exmandatario antes de abandonar el recinto.

Nieto pidió la palabra en tres ocasiones de forma consecutiva y antes sendos "no procede" del presidente actual, Juan Francisco Rodríguez, dijo que pedía votaciones y revisar las acreditaciones de las acciones representadas. Un "no procede" después decidió impugnar la asamblea y se plantó ante el notario que estaba en la mesa presidencial para hacerle entrega de documentación. Le siguió el que fuera su vicepresidente, Ramón Ruiz, quien impugnó también, y ambos se marcharon de la asamblea. Seguidamente, uno de los asesores del club, Luis Hurtado, explicó que no procedía la petición del ex presidente porque "no se puede exigir una revisión particular en plena asambla cuando no se hizo anteriormente".

Juanito, que calificó la situación de la entidad como "a punto de tocar fondo, y por duro que suene no os lo voy a ocultar", vio cómo salían adelante masivamente todos y cada uno de los puntos de las dos asambleas, en los que tenían especial protagonismo las cuentas tanto del pasado ejercicio como del actual.