Manolo Sánchez lo dijo claro. "No voy a tirar la toalla. Ahora solamente pienso en entrenar mañana y preparar el próximo partido". El técnico del Cacereño se ve capacitado para sacar al equipo de la difícil situación en la que se encuentra. "El vestuario está triste. Yo voy a estar a muerte con ellos", añadió. Para Manolo, el resultado no reflejó lo que había sido el partido, "pero esto es fútbol. Ellos han metido un gol por la escuadra y nos otros no".