Un nuevo caso positivo ha sido detectado en el Tour de Francia en la undécima etapa entre Marsella y Montpellier, donde un corredor, cuyo nombre será desvelado próximamente por la Unión Ciclista Internacional (UCI) fue controlado por testosterona, según la edición digital de "L'Équipe".

El positivo ha sido desvelado gracias a un método de detección que permite diferenciar en la orina de un ciclista la testosterona exógena, inyectada o consumida, de la producida por el propio ciclista.

La etapa de Montpellier, disputada el pasado jueves, fue una segunda jornada de transición entre los Alpes y los Pirineos. Se impuso al sprint el sudafricano Robert Hunter, del Barloworld, seguido del suizo Fabian Cancellara, del CSC, y del brasileño Murilo Antoniobil Fischer, del Liquigas.

De confirmarse, sería el segundo dopaje que se detecta en la presente edición del Tour, después de que el kazako Alexandre Vinokurov fuera declarado positivo por una transfusión de sangre homóloga en la contrarreloj que ganó el pasado sábado en Albi.

El equipo Astana fue excluido de la carrera y el ganador de la pasada Vuelta a España se enfrenta a una sanción de dos años de suspensión. Vinokurov, que ganó dos etapas en el Tour, ha negado que se hubiera dopado y asegura que sufre una campaña de desestabilización.

El caso que será anunciado próximamente por la UCI se refiere a testosterona, una hormona andrógena anabolizante por la que dio positivo el ganador de la edición del año pasado, el estadounidense Floyd Landis.