Días de idas y venidas en el Díter Zafra. Ayer se cerró definitivamente el acuerdo con el internacional portugués Nuno Alfonso y el pasado lunes dejaba definitivamente la disciplina azulina el cancerbero Riobó. El central luso, que también puede actuar en el centro del campo, se comprometió hasta final de temporada aunque en el contrato figura una claúsula en la que se contempla una opción de una campaña más. Ahora sólo resta que adquiera la forma física óptima y quede a disposición de Angel Marcos que tendrá en él un prometedor refuerzo cara al futuro.

En cuanto a Riobó, que deja el club a petición propia y por un grave problema familiar, volverá tras las fiestas navideñas para despedirse de sus compañeros. En el entorno de la entidad agradece profundamente su profesionalidad y el gesto que quedarse hasta que su compañero Raúl se ha recuperado de la lesión.