28 de mayo de 2016. El Atlético de Madrid, entrenado por el argentino Diego Pablo Simeone, pierde en Milán su segunda final de la Liga de campeones en tres años, esta vez en la tanda de penaltis y, de nuevo, ante el Real Madrid. En la conferencia de prensa posterior, el ‘Cholo’ declara: «Es un momento para pensar. Felicitar al Real Madrid, una vez más superior, esta vez en la tanda de penales, y felicitarle por ganar un trofeo de mucha jerarquía. Del segundo no se acuerda nadie, perder dos finales es un fracaso».

21 de mayo de 2017. El Atlético juega su último partido oficial en el Vicente Calderón ante el Athletic de Bilbao (3-1). En lo actos de despedida después del encuentro, el entrenador se dirige a la grada, repleta de colchoneros. “Me preguntan continuamente si me voy a quedar. Sí me voy a quedar. ¿Y saben por qué me voy a quedar? Porque este club tiene futuro, y el futuro somos todos nosotros”.

5 de septiembre de 2017. El técnico argentino, con contrato en vigor hasta 2018, amplia su convenio con el Atlético de Madrid por dos temporadas, con lo que queda vinculado al club rojiblanco hasta el 30 de junio de 2020, fecha en la que completaría nueve cursos en el club.

16 de septiembre de 2017. El Atlético inaugurará el nuevo estadio Metropolitano en el partido de la cuarta jornada de liga contra el Málaga y el nuevo y flamante recinto rugirá al grito de ‘Ole, Ole, Ole, Cholo Simeone’, el estratega responsable del renacer del club, el que lo devolvió a la elite europea y mundial, el ídolo de una afición volcada con él.

La noticia es la mejor que podría recibir la hinchada. Simeone es para el Atlético y su gente. El ‘Cholo’ y su filosofía arrastran seguidores, no sólo en el fútbol, sino también en otros ámbitos de la sociedad. Su ‘partido a partido’, su capacidad para levantarse después de duras caídas, su energía, su entrega, su trabajo desde la humildad.