La mejor puntuación en solo técnico de su vida (93,6534) le valió ayer a Ona Carbonell la medalla de plata en la especialidad, la primera de España en los Mundiales de Budapest, y estar cada vez más cerca de la representante rusa, Svetlana Kolesnichenko (95,2036), de la que le separaron 1,5 puntos. El podio lo completó la ucraniana Anna Voloshina (91,9992), que le dio la vuelta al preliminar, en el que la japonesa Yukiko Inui (91,7490) había sido mejor.

La luz de Carbonell, bronce hace dos años en Kazán, emergió sobre la piscina del Parque Urbano de Budapest en una mañana lluviosa: mejoró sus prestaciones del preliminar y firmó una portentosa actuación, enérgica, segura y con determinación.

DOS OPCIONES DE PODIO / En este ejercicio, las entrenadoras querían sacar el máximo potencial de Carbonell y lo lograron. Pese a tratarse de un ejercicio técnico, la coreografía es muy artística. El ejercicio se fue puliendo durante meses y se probó en varias competiciones internacionales hasta dar con la tecla. Los 93,6534 puntos obtenidos colmaron sus expectativas. Los 95,2036 de Kolesnichenko quedaron lejos, pero más cerca que nunca, mientras que la distancia con el bronce se acrecentó.

La de ayer fue su 20ª medalla en un Mundial, una trayectoria iniciada en el 2007 y que se alarga durante seis Mundiales. «Ha sido la mejor puntuación de mi vida en solo. Ya estaba muy satisfecha de ganar en impresión artística en el preliminar a la rusa, porque nunca lo había logrado», comentó Carbonell.

La nadadora resaltó su trayectoria. «Haber participado en seis mundiales y haber ganado medalla en todos es muy difícil », dijo.

Extremadura cuenta con un representante en estos mundiales, el almendralejense Miguel Durán, que no competirá hasta el próximo domingo.