Aunque solo se hayan disputado siete jornadas de liga, el Cacereño tiene hoy ante si una final contra el Lanzarote (11.30 horas, Príncipe Felipe), que llega a Cáceres con los mismo apuros que los locales tras perder sus últimos seis partidos. Con este rival en horas bajas se puede producir al fin la ansiada recuperación del Cacereño, que con Angel Marcos en el banquillo debe ofrecer al su parroquia algo más de lo que se ha visto hasta ahora en el estadio verde.

La necesidad apura porque el pozo es cada vez más hondo y el Cacereño necesita salir cuanto antes de esta dinámica negativa, porque la salvación está cada vez más lejos, de momento, a cinco puntos, dos partidos.

NUEVO ONCE INICIAL Marcos alineará hoy un nuevo once inicial, y ya van ocho distintos en las ocho jornadas disputadas. A las posibles dudas que aún pueda tener el técnico verde (este es su segundo partido en el banquillo), se unen las bajas por lesión de Chiqui, que estaba disfrutando de minutos en el centro del campo, y la de Roberto, fijo en el centro de la defensa. A estas ausencias se suma la de Borja, que sigue sin estar listo ("le faltan muchos minutos", dice Marcos) y volverá a jugar con el filial para coger ritmo.

El entrenador verde no quiere hablar de final, pero afirma que "lo que sí sé es que es un partido importantísimo para muchas cosas: para la confianza de los jugadores y de la afición. Sé que el público va a estar con los jugadores", dijo Marcos, sabedor de que esa debe ser una de las bazas del equipo cuando juegue en casa.

Consciente de los errores del equipo, Marcos es autocrítico, "tenemos que mejorar en todo", pero piensa en positivo, "lo bueno del equipo es que todos están dispuestos a dar la cara".

Sobre los aspectos a mejorar, el de Serradilla, habla de no encajar goles, "porque lo que hace es que merme la confianza del equipo. La defensa suele dar tranquilidad al resto de líneas", recalca. Esa línea, la de la defensa, es la que más problemas ha dado durante toda la semana. Si Roberto está descartado por lesión, Palero, Cazorla y Diego han entrenado con problemas estos días, aunque hoy deberán jugar.

El Cacereño es el segundo equipo más goleado del grupo II de Segunda B (13), solo superado por el rival de hoy, el Lanzarote, que ha recogido en 17 ocasiones el balón del fondo de su portería. Por esta razón la de hoy es la mejor oportunidad para despegar, porque visita el Príncipe Felipe un rival flojo, en horas bajas, que puede ser el perfecto sparring para este Cacereño de Angel Marcos. "Los problemas del Lanzarote son más bien económicos y vienen de la pasada temporada. Está claro que eso siempre afecta en su rendimiento, pero sé que aquí van a venir al cien por cien", dice el técnico verde analizando al rival, que pide olvidar el pasado y centrarse en el siguiente partido, en el este caso el del Lanzarote.