El Cáceres conoce muy bien la cancha leonesa y anoche, después del décimo enfrentamiento entre ambos equipos, la balanza se ha ido hacia al bando visitante en un final de partido de auténtico infarto.

El equipo extremeño cimentó la victoria en la dirección de Dani López, el acierto desde la línea de 6,25 de Blackshear que acertó casi todo lo que tiró y en la maestría de Asselin en los momentos cruciales.

El equipo de Angel Jareño dio alas a un Cáceres que nunca tiró la toalla y salvo el primer cuarto, siempre ganó en los siguientes (18-19; 14-18; 17-20) consiguiendo al final una victoria que no entraba en el guión del equipo leonés, que pecó de pensar en la victoria antes del pitido final.

Las primeras diferencias (14-7) lanzaron las primeras alarmas en el banquillo de Ñete Bohigas, que se veía obligado a pedir primer tiempo. Dani López se echó al equipo a su espalda e intentó reconducir la situación. Pocos minutos después el Cáceres se acercaba (16-15) no dando por perdido el primer cuarto, aunque entonces apareció Barnes y en dos acertadas jugadas dejaba un marcador de 22-16.

En el segundo cuarto, la lectura del partido no cambió ya que el Cáceres es estrellaba una y otra vez con la zona leonesa y así se llegaba a la máxima diferencia de diez puntos (36-26). Antes del descanso, León se relajó dejó acercarse al equipo visitante.

EMOCION Con el segundo tiempo llegó la explosión cacereña que en los primeros tres minutos con un parcial de 1-8 lograba dar la vuelta al marcador (41-43) por primera vez en el partido gracias ante la desesperación leonesa.

El equipo cacereño se permitió el lujo de marcar su máxima con cinco puntos de ventaja en un cuarto donde León estuvo totalmente perdido. Aún así, entró a los últimos diez minutos con ventaja (56-55).

Los locales tuvieron el paritdo tan controlado que ganaban por siete a falta de dos minutos (71-63), pero entonces apareció el base verdinegro Dani López. Tomó las riendas, dirigió y arriesgó hasta tal punto de dar la vuelta al marcador.