Mérida - 1: Garavano, Samir, Molina, Jesule, Troyano, Chus Bravo, Víctor Bravo (Debris, min.59), Jandro (Xavi Moro, min.62), Ismael, Machicado (Raúl, min.78) y Magallanes.

Atlético de Madrid B - 1: David de Gea, Sergio, Jaime, César, Pichu Atienza, Aitor Monroy, Cedric (Aitor Núñez, min.62), Coque, Guerra (Rubén Pérez, min. 88), Ramos (Alex Quillo, min.82) y Claudio.

Goles: 0-1, Ramos, min.42 (penalti); 1-1, Molina, min.89.

Arbitro: Valdés Aller. Castellano-Leonés. Mal. Amonestó a los locales Víctor Bravo y Troyano, y a los visitantes Pichu Atienza, Ramos, Sergio y Coque. Expulsó con doble amarilla a Jesule en el minuto 57.

Incidencias: Estadio Municipal Romano. 1500 espectadores. Los dos equipos salieron portando la bandera de Extremadura.

Volvió a cumplirse el sino del Mérida desde que su banquillo lo ocupa Goran Milojevic, y es que hasta el rabo todo es toro y hasta que no pite el árbitro no acaba el partido. Esto lo sabe el aficionado del Mérida y siempre espera esa última jugada para que marque su equipo y de nuevo ocurrió ayer.

Lo cierto es que este empate puede tener dos lecturas: tal y como se desarrolló el encuentro el Mérida salvó un punto por casta, porque la cosa se puso muy complicada con la expulsión de Jesule en el 57 cuando todavía se estaba por detrás en el marcador. Sin embargo, la otra lectura puede ser menos optimista y es que el Mérida vuelve a dejar escapar en casa lo que consigue fuera, cierto es que el filial colchonero ha hecho un gran partido, pero si se quiere mirar arriba, la casa propia debe ser infranqueable.

EL PEOR MOMENTO Arrancó el partido con un Mérida bien plantado y acercándose a las inmediaciones de De Gea. Ya a los dos minutos tuvo el primer acercamiento con peligro Ismael, pero el pequeño extremo romano mandó el balón directamente fuera. Tras un empalme alto de Magallanes a los seis minutos y hasta la media hora de juego, el mejor del filial colchonero fue su cancerbero con el que se tropezaron Ismael y el propio Magallanes, en sendas ocasiones claras de gol. El primero tras un gran contraataque en el que Ismael no supo resolver el mano a mano, el segundo de nuevo en un empalme.

A pesar de que el Mérida volvía a mostrar el mismo juego ofensivo de las últimas jornadas, atrás no se mostraba tan contundente y a partir del minuto 25, los colchoneros fueron mejores obteniendo además el premio del gol en un penalti de Garavano sobre Guerra que transformó Ramos a tres minutos para el final. La cosa pudo ser peor para el Mérida, si no llega a responder a la perfección Matías a un disparo desde la frontal de Coque. En definitiva, unos primeros 45 minutos en los que la diferencia radicó en que el Mérida no aprovechó cuando era mejor, mientras que el Atlético B sí.

El comienzo de la segunda parte fue de la peor forma posible para el Mérida, pues tras doce minutos sin crear peligro, Jesule sacó el brazo a pasear en un salto y vio el camino de los vestuarios antes de tiempo. La reacción de Milojevic fue retirar a Jandro y Víctor Bravo para dar entrada a Debris y Xavi Moro, de esta forma, caía Machicado a la derecha y se quedaba solo arriba Magallanes. Minutos después, el propio Machicado fue sustituido por Raúl Martín.

SIN MORDIENTE En estos segundos 45 minutos prácticamente no se pisó ninguna de las dos áreas, Hasta que llegó el minuto ochenta y nueve para que todo cambiara. Samir saca una falta lejana que peina hacia atrás Ismael en la frontal, despista a De Gea y le cae el balón a Molina para empatar. Empate a uno y cuatro minutos de alargue y de auténtico infarto, pues el propio Molina salvó a los suyos bajo palos tras un remate de cabeza de Rubén Pérez. El Mérida estuvo a punto de probar la medicina que tan bien se le da.

Al final, empate en un partido con menos calidad de lo esperado, motivado por el mal estado del terreno de juego.