Celta B: Sergio, Víctor Vázquez, Sergio Rodríguez, Gaffoor, Carlos David; Lede; Pedro Vázquez, Jota (Pillado, min. 67), Edgar, Mateo; Kech (Iván, min. 87).

Club Deportivo Badajoz: Pagola, Gabi Grillé, Martín, Aloisio, Jaraiz; Sandro, Amine (Ruby, min. 91); Tete (Ortiz, min. 87), Alex Herrera (Marcos, min. 78), Alberto; Viyuela.

Arbitro: Cordero Vega, colegio cántabro. Amonestó a Gaffoor, Carlos David y Mateo por el Celta B y a Grille y Martín por el Badajoz

Incidencias: 800 espectadores asistieron en el campo de Barreiro al encuentro de la vigésima jornada del grupo I de Segunda División B.

Ante el Celta B se toma un respiro el Badajoz con un buen punto a domicilio, un botín labrado gracias a la seguridad defensiva y a un Pagola inconmensurable bajo los palos. Los pacenses, por su parte, rompen su racha de cinco derrotas consecutivas y pueden ver el futuro con algo más de optimismo.

En los primeros minutos de juego se pudo ver a un Celta B que apostó decididamente por el partido. La presión sobre la línea de creación del conjunto pacense fue agobiante, aunque no consiguieron crear ocasiones de peligro. Poco a poco las fuerzas se fueron equilibrando, aunque siempre con un Celta B que no cedía el balón. Sin embargo los jugadores del Badajoz tenían muy clara la consigna, y cada vez que se hacía con el balón salían hasta cinco jugadores a la contra para adelantarse. Lo malo es que toda la fuerza se difuminaba cuando llegaban al área viguesa, que conseguía cortar el juego con relativa comodidad.

Sin embargo, a los cinco minutos de juego Viyuela dispuso de la primera gran ocasión, teniendo que esperar hasta la primera media hora para que Sergio volviera a ver a los jugadores pacenses rondar por su área.

A medida que pasaban los minutos, había un jugador que comenzaba a destacar por encima de los demás, y ese no era otro que el portero del Badajoz Pagolla. Sin lugar a dudas sus intervenciones hicieron que el conjunto pacense pudiera llevarse un punto de Barrerio. Quien tuvo su día más negro ante el guardameta fue el vigués Jota, quien posiblemente soñará durante muchos días con los balones que le sacó en la misma línea de gol.

MAS ACOSO En la segunda parte el dominio del Celta B fue mucho más claro. El Badajoz ya no salía con tanta claridad a la contra, y poco a poco retrasaba líneas intentando reforzar su trabajo defensivo. El Celta B tenía un serio problema, además del que suponía el portero Pagola, y no era otro que tanta insistencia sobre la portería rival, podría llevarlo a desprotegerse en defensa y pagarlo caro con una contra.

El técnico vigués cambió de posición a Kech y Edgar buscando otras opciones, pero la prueba duró muy poco volviendo ambos jugadores a sus posiciones de salida. En el primer cambio le dio entrada a Pillado en el centro del campo buscando un aire nuevo, pero tampoco lo consiguió.

A medida que se acercaba el final del encuentro, y el Badajoz retrasó líneas renunciando al ataque y centrando todos sus esfuerzos en defensa, el técnico volvió a cambiar el sistema del Celta B, retrasando a Pillado a la línea defensiva, y colocando a Gaffoor como un segunda punta, intentando aprovechar su altura para los balones altos.

A cinco minutos para el final, llegó la jugada polémica dentro del área pacense, al protestar todos los jugadores del Celta B una mano de un defensor en el medio de un barullo en donde estaban todos los jugadores que había sobre el terreno de juego, con excepción del meta céltico Sergio.

El Badajoz movió el banquillo buscando reforzar la línea defensiva, con la clara intención de sumar un punto que le permitía romper una racha negativa de cinco derrotas consecutivas, aunque lleva desde noviembre sin ser capaz de ganar un partido.

El Celta B insistió en los minutos finales buscando el tanto que acabara con la racha de varios partidos sin conocer la victoria. Eran acciones a la desesperaba que lo que buscaban era meter balones por arriba sobre el área del Badajoz para ver si alguno de sus jugadores altos conseguía rematar a puerta.

El problema seguía siendo el portero visitante, que además de hacer buenas intervenciones, tiene una gran talla y no se le escapaba ningún balón alto que llegaba a su área. Así, el choque terminó con un punto para cada uno de los equipos.