EL ATLETA se quejó de haber recibido de la Federación Española de Atletismo un trato "injusto y discriminatorio en relación con otros atletas", aunque abogó por tender la mano "al diálogo" y que se solucione el conflicto tras los Mundiales de Helsinki, en los que fue plata en 20 kilómetros marcha. Anunció que seguirá entrenando con el polaco Robert Korzeniowski, un motivo de la polémica.