La candidatura de París para acoger los Juegos Olímpicos del 2012 superó la visita de la Comisión de Evaluación del COI sin perder su condición de favorita, pero ha visto cómo le han surgido manchas, como una polémica oferta de visados a la familia olímpica y protestas ecologistas.

Los responsables de París 2012 se muestran serenos tras la visita de los inspectores del COI, huyen de todo tipo de confianza y tratan de restar importancia a los asuntos surgidos durante la visita.

Las alabanzas de la presidenta de la Comisión de Evaluación, Nawal el Moutawakel, que destacó la "calidad" del informe parisiense, no dejan traslucir que París haya perdido su condición de favorita por delante de Madrid, Londres, Nueva York y Moscú, pero el propio alcalde, Bertrand Delanoe, insiste en que la victoria se dilucidará "por muy poca cosa".

Por eso, y porque los miembros del COI no tienen que responder de su voto ante nadie, las polémicas que le han surgido a París pueden tener consecuencias nefastas para las opciones de la capital francesa para albergar los juegos.