Bien se va a acordar el entrenador del Mérida, Fabri González, del colegiado madrileño Pizarro Gómez, pues en las dos ocasiones en las que ha dirigido un encuentro del Mérida en la presente temporada, ha perjudicado al equipo emeritense. En la jornada decimocuarta, perdieron los romanos 2-1 en Puertollano y Fabri se quejó de los dos goles que recibió su equipo, en el primero por falta previa a Carlos Rubén, en el segundo por falta al cancerbero Orlando. En la rueda de prensa posterior al encuentro se quejó airadamente del colegiado.

La pasada jornada volvía a cruzarse Pizarro Gómez en el camino del Mérida y expulsó al entrenador romano además de no ver un penalti claro sobre Sabino. Esta expulsión ha sido sancionada con dos encuentros por reiteración, ya que es la tercera vez en lo que se lleva de temporada que el entrenador emeritense ve el camino de los vestuarios antes de tiempo.

Lo mismo le ocurrió al preparador físico, Francisco Velázquez, a quien se le ha sancionado con un partido. De otro lado, Cuevas vio su décima tarjeta amarilla de la temporada y tampoco podrá estar el domingo a partir de las 17.00 horas en el Municipal de Lucena. No hay mal que por bien no venga ya que podrá cuidar mejor el esguince que se produjo la semana pasada y que le mantuvo como duda hasta el final.

Del resto de la plantilla todos están entrenando con normalidad, excepto Segovia que con una sobrecarga ha entrenado a un ritmo menor, aunque no parece que peligre su participación en el partido del domingo.