Solo dos asistencias le faltaron a Pau Gasol para completar estadísticamente su primer triple doble con los Lakers. Pero sus números fueron, igualmente, de All Star. Con 21 puntos, 19 rebotes, 8 asistencias y 5 tapones, sacó los galones ante la ausencia de Kobe Bryant y se convirtió en la estrella del convicente triunfo frente a los San Antonio Spurs, uno de los equipos que deben discutirle la supremacía en la Conferencia Oeste (101-89).

"Es importante demostrar que hay equipo más allá de Kobe y de Bynum", explicó Gasol en los vestuarios del Staples. "Las lesiones ocurren, pero lo importante es que demos un paso adelante y que haya excusas; sea quien sea que falte, el equipo debe jugar al máximo".

DISIPAR DUDAS El triunfo no solo sirvió para que Gasol ejerciera de líder en la cancha, un papel al que ya está acostumbrado en la selección. También para que los Lakers despejaran las dudas que empezaban a cernirse en torno al equipo, después de algunas derrotas dolorosas como en la pista de los Grizzlies y ante los Denver Nuggets.

Sin Kobe, con un esguince de tobillo, y sin Bynum, con un golpe en la cadera, el equipo también es competitivo. Lo apuntó el sábado, con una victoria en la pista de los Blazers, que puso fin a una racha de cinco años sin ganar en el Rose Garden. Y lo ratificó ayer ante los Spurs, a pesar de la ausencia también importante de Bynum. "Aún nos quedan dos partidos antes del All Star y si necesita un respiro, le vamos a dar la oportunidad de que se lo pueda tomar", explicó el técnico Phil Jackson.

"Creemos en nosotros, tenemos calidad y contamos siempre con quienes no juegan habitualmente, esa es la naturaleza de nuestro equipo y es un lujo", explicó el jugador catalán, que admitió sentirse honrado por acudir a su tercer All Star. "Es un honor, estoy muy agradecido a los técnicos que me han elegido. Así que iré a disfrutar".