La temporada NBA comenzó según el horario previsto y las previsiones de negocio. El comisionado David Stern se desplazó a Los Angeles para entregarle un voluminoso anillo de campeón valorado en más de 10.000 dólares a cada miembro de los Lakers. Solo un jugador del equipo se quedó sin presente: Ron Artest, única novedad del equipo para esta temporada. Artest atrajo su cuota correspondiente de atención con un llamativo corte de pelo que diseña el logo de los Lakers en la parte trasera de su cabeza, la palabra campeón en caracteres chinos en el lado izquierdo y la palabra chatty (conversador, simpático..) en el lado derecho.

Pau Gasol, con problemas musculares en la pierna derecha, no jugó porque no hay que forzar y porque aún quedan 81 partidos más de liga regular. En cuanto acabó el encuentro, Pau entró en el vestuario, cogió el anillo en su correspondiente caja negra y se fue al instante, agarrando fuerte el único objetivo del día. Los Angeles Clippers era el rival elegido como pareja de baile y escaparate de presentación del número uno del draft , Blake Griffin, pero se ha lesionado para mes y medio. Su equipo perdió 99-92 sin luchar mucho.

Desde el inicio del partido apareció en el videomarcador central del Staples la siguiente promoción: "Si ganan los Lakers y los Clippers no alcanzan los 100 puntos anotados, se podrá canjear cada entrada de este partido por dos tacos sin abono adicional". El público se fue contento.