Un espectacular gol del delantero Pauleta decidió un choque gris entre Portugal y Angola. El tanto del punta se produjo tras una sensacional jugada personal de Luis Figo, que superó en velocidad a la defensa africana.

El encuentro fue muy gris. Los portugueses dominaron casi siempre, aunque en modo alguno desplegaron el fútbol preciosista de la última Eurocopa, en la que llegaron a la final que perdieron ante Grecia. Los angoleños pusieron todo de su parte para conseguir el empate, pero carecieron de profundidad y sus delanteros siempre se estrellaron ante la contundente defensa lusa.

El conjunto de Angola estuvo siempre metido en el partido y a base de casta, pusieron en algún apuro a los portugueses.

Al final hubo ciertos nervios para la afición portuguesa, que respiró complacida cuando el árbitro pitó el final del encuentro. En cualquier caso, las dudas son claras y el equipo que entrena el brasileño Scolari, que sacó un equipo muy ofensivo, tendrá que mejorar mucho para conseguir un buen resultado en el Mundial de Alemania.