Alguien llegó a decir que, minutos antes de tomar la salida en Holanda, Dani Pedrosa había ido a vomitar a su box. Nada de eso. Simplemente fue a hacer pipí, así de sencillo. "No, no, no tengo excusa para justificar lo ocurrido. Me he caído en la quinta vuelta y aún no sé por qué. Claro que mi compañero de equipo, que también se ha caído en esa misma curva, tampoco sabe por qué. Pero, insisto, no pienso decir que es culpa de la moto, ¡ni hablar! No pienso quitarme el muerto de encima, no ahora que debemos de trabajar todos juntos duro, muy duro, para salir del bache".

Pedrosa se sabe metido en un lío, pero anuncia que volverá a ganar. Es más, lo desea con toda su alma para darle en las narices a los que creen que está pasando por el peor momento de su carrera.

"Puede que haya cometido algún error, puede, pero de esta solo saldremos si empujamos todos juntos. Estar en esta situación es culpa de todos y solo nosotros podemos cambiarlo. Lo más importante es no perder la motivación", señaló el tricampeón catalán, que lleva más de un año sin ganar.

"Las Yamaha vuelan, tanto que ni Stoner puede ir a su rebufo", señaló el líder de Honda, que felicitó a Rossi por sus 100 triunfos. "Lo que está haciendo tiene un mérito increíble, ¡bravo por él!". Y, al decirlo, se le vio muy sincero, roto, sí, "porque duele llegar con la ilusión que lo hice a Assen, hacer unos buenos entrenamientos, ver que la moto mejora y, al final, acabar en el suelo".