Pedrosa volvió a protagonizar una de sus clásicas carreras, aquellas que el pasado año le permitieron proclamarse campeón.

Pedrosa dejó claro el porqué de su condición de campeón y mandó como siempre, como en él es habitual, sin que sus rivales pudiesen hacer nada por evitarlo. Estuvieron los mismos contertulios que en 2004 y el resultado fue el mismo, nuevo triunfo del piloto de Honda, al que, sin embargo, le podrían salir a no mucho tardar correosos y peligrosos rivales en la figura de Jorge Lorenzo y Héctor Barberá.