Algeciras: Calleja, Castillo, Arturo, Vojvoda, Ortega, Aitor Santos (Marín, m.73), Jorge Zafra, San Julián, Mario (Curro, m.62), Esparza y Rebollo (Fran Amado, m.62).

Extremadura: Toni García, Javi Selvas, Nandi, Marcos, Olivar, Roberto, Camacho, Lolo, Pavone, Goizka (Peri, m.84) y Cobos (Manuel, m.63).

Gol: 1-0, M.90: San Julián, de penalti.

Arbitro: López Martínez, del colegio murciano. Amonestó al jugador local Aitor Santos y a los extremeños Roberto, Nandi y Olivar.

Incidencias: Partido disputado en el estadio Nuevo Mirador ante unos cuatro mil espectadores. Terreno de juego en buenas condiciones.

El Extremadura dejó escapar justo al final un empate por el que había estado luchando durante todo el partido, pero el claro penalti cometido sobre Fran Amado en el minuto 90, transformado por San Julián, otorgó la victoria a un Algeciras que también buscó con ahínco otra victoria en el Nuevo Mirador.

La estadística otorgaba antes del partido la condición de favorito a un Algeciras invicto en su campo, ante un cuadro extremeño que aún no conocía esta temporada el triunfo lejos del Francisco de la Hera.

Así, tras unos primeros minutos ciertamente desconcertantes, con muchos balonazos y pérdidas en ambos bandos en el centro del campo, el cuadro algecireño tomó el mando del encuentro a partir del cuarto de hora.

Por su parte, los de Almendralejo dejaron jugar a su rival, esperándolo en su campo y siempre dispuestos a hacer daño al contragolpe, con Pavone como hombre más peligroso.

El cuadro albirrojo tuvo una gran ocasión en la primera mitad, pero San Julián remató a placer en el área pequeña un saque de esquina y obligó a estirarse al portero extremeño Toni García para desviar el balón.

Tras el descanso, el dominio siguió siendo local, aunque en esta ocasión con un cambio importante puesto que los albirrojos, al contrario que en los primeros cuarenta y cinco minutos, gozaron de ocasiones claras de gol.

La más clara de ellas correspondió al delantero Juan Carlos Rebollo, quien, tras una internada, no tuvo fortuna a la hora de cruzar el balón ante la salida del portero Toni García.

Pavone permaneció inédito, se convirtió en un defensa más y su única ocasión en este segundo tiempo fue en un contraataque en el que prefirió centrar en lugar de disparar.

AUMENTA LA PRESION Según pasaron los minutos, las ocasiones del Algeciras aumentaban, pero el gol no llegaba, de modo que el entrenador local, Félix Arnáiz Lucas, sacó al campo toda la artillería que le quedaba en el banquillo.

Por su lado, Cisqui se lo tomó con algo más de calma y prefirió retirar a un oscuro Cobos por el siempre experto en este tipo de encuentros Manuel, pero lo cierto es que el cambio no se notó.

Tanto unos como otros pusieron a todos sus efectivos a una sola tarea, el Algeciras a atacar y el Extremadura a defender. Y por lo que estaba ocurriendo, la zaga se estaba llevando la partida.

Pero en el minuto 89, la historia del partido cambió radicalmente al cometer Olivar un claro penalti sobre Fran Amado que transformó San Julián para alborozo de los locales y tristeza de los de Almendralejo, que tuvieron el empate a su alcance.