La Unión Polideportiva Plasencia está a punto de consumar su descenso a Regional Preferente, circunstancia que pocos hubieran pronosticado al inicio de temporada. El histórico club extremeño vive el peor momento de su prolongada vida languideciendo en el grupo XIV de la Tercera División. Da un poco de lástima que entidades de la solera de la UPP se encuentren en esta penosa situación. Si ya las aguas bajan turbias, si como parece se consuma la tragedia deportiva estaríamos ante un futuro más que incierto. Se habla ya de una fusión con el Ciudad de Plasencia, el otro club placentino en la categoría, y por ahí parece que puede estar la supervivencia en categorías nacionales. Sería lo lógico, siempre que el propio Ciudad consiga la permanencia, que también lo tiene complicado. Dicen que la unión hace la fuerza, y está demostrado que la dispersión competitiva puede ser negativa. En Badajoz ocurre algo parecido: no parece demasiado normal que haya tres equipos en una misma división, y más en los duros tiempos que corren.
