La imagen de Ferrán López agarrando por la cintura al colegiado principal del partido del sábado ante el Fórum, Juan Carlos Arteaga, ejemplifica la enorme frustración de un equipo que acababa de perder una grandiosa oportunidad para amarrar la permanencia. El Cáceres, con su dolorosa derrota frente a los vallisoletanos, cancelaba así la peor primera vuelta de su historia de once años en la Liga ACB. El cómo del resultado --encajando un brutal parcial entre el tercer y el último cuarto que hizo que el partido pasase de estar controlado a totalmente perdido-- es tan punzante como sus consecuencias: el regreso a los puestos de descenso y el hecho de que las incógnitas que rodean al club se multipliquen.

Los cuatro triunfos en 17 partidos suponen uno menos de los obtenidos hace un año, cuando la plantilla que dirigía Alfred Julbe acababa el primer tramo de la competición en antepenúltimo puesto. Las marcas de las temporadas 92-93 y 97-98, en las que se rozó el descenso de categoría, también fueron mejores.

EN POSITIVO

Desde el Cáceres, como es lógico, intentan dar un mensaje de optimismo, de que nada está perdido pese a ser rebasados por el Fórum en la clasificación y los problemas se hayan ampliado en lo extradeportivo.

Ahora llegan dos semanas de parón liguero hasta reanudar la competición en Lleida el primer día de febrero (20.45 horas). Las pocas o muchas energías que le quedan al club deberán concentrarse en varios frentes: recuperar al vestuario de una derrota que se presume traumática, aclarar --aunque sea mínimamente-- el panorama económico y encontrarle un sustituto a Deon Thomas, el más añorado el sábado. Muy pocos equipos pueden permitirse perder a su mejor anotador y reboteador sin resentirse.

La primera cuestión parece sencilla de conseguir. La plantilla es experimentada y está unida ante las adversidades y el carácter y la determinación es algo que no se echa a faltar en jugadores como Ferrán López, Juan Antonio Orenga y hasta Kevin Thompson. El pívot norteamericano ha sido un gran hallazgo y su estupenda actitud fuera de la pista la refrendó el sábado con otro prometedor partidazo.

En cuanto a la economía, la solución no es fácil y se acerca a lo utópico para una entidad que se ha acostumbrado ya a vivir en el alambre. En este sentido, se espera una decisiva asamblea en la semana anterior al choque frente al Caprabo y no se puede descartar ninguna opción. Los mensajes de que así no se puede seguir, sobre todo por la imagen que se está dando a nivel nacional, cada vez son más frecuentes. En el club están especialmente molestos con un reportaje en el diario Marca en el que, a doble página, se aireaba la tesitura "de okupa" de Bobby Martin en una vivienda sin luz ni agua después de rescindirse su contrato.

Su compatriota Deon Thomas tampoco volverá a vestir de verdinegro, a no ser que haya un giro espectacular de los acontecimientos. Se considera que le ha fallado al club, a la ciudad y, sobre todo, a sus compañeros. El cuadro técnico se ha mantenido especialmente informado del mercado durante los últimos días, aunque no será fácil fichar a un jugador de garantías y que, además, acepte llegar a una plaza que huele a zozobra. Su perfil está perfectamente definido: un anotador que se mueva con soltura en el poste bajo y ayude en los rebotes. La lista de nombres, como ya viene siendo habitual, está encabezada por Tanoka Beard.