En Inglaterra no se hablaba ayer de otra cosa. El francés Thierry Henry, capitán del Arsenal, pidió ayer perdón a los seguidores del equipo por el fiasco del penalti desperdiciado este sábado en el partido de la Premier inglesa contra el Manchester City.

"Quiero pedir perdón a todos los seguidores del Arsenal porque eso no era la forma correcta de hacer las cosas. La próxima vez lo tiraré yo directamente", declaró Henry, uno de los protagonistas del fiasco futbolístico.

El francés Robert Pires, en lugar de tirar directamente a puerta al ejecutar un penalti, quiso ceder levemente hacia la izquierda para que rematara su compatriota Henry, pero sólo acertó a rozar el balón, que apenas se movió del punto de lanzamiento y fue despejado por un jugador del Manchester City.

La jugada terminó con falta a favor de este último equipo, aunque se ignora por qué la señaló el árbitro. Henry admitió como idea suya la ejecución de la jugada, que ya fue interpretada por el holandés Johan Cruyff cuando, al lanzar un penalti, cedió a Jesper Olsen, su compañero en el Ajax, para que rematara en la liga holandesa 1982/83 y terminó en gol.

Desgracia

"Fue idea mía, pero no lo fue que a Pires se le durmiera la pierna. ¿Qué sucedió?. No lo sé", bromeó Henry. "Para desgracia de Robert (Pires) va a ser una jugada que aparecerá en todas las listas de cosas extrañas que pueden suceder en un campo de fútbol. No sé por qué se le durmió la pierna", dijo el delantero.

"Afortunadamente", añadió Henry, "ahora podemos reírnos. Nunca debimos hacer esa jugada, pero nos quedamos con los tres puntos", apuntó el delantero francés.