Kathy Switzer es una pionera y toda una personalidad en el atletismo de Estados Unidos. Hace 50 años, las imágenes del director del maratón de Boston empujándola para intentar echarla de la carrera por el simple hecho de ser mujer dieron la vuelta al mundo. Switzer, una luchadora además de pionera, no se rindió, y acabó aquel primer maratón histórico en 4 horas y 20 minutos luciendo el dorsal 261.
El próximo 17 de abril, 50 años después de aquel 1967, Switzer repetirá dorsal en Boston, la carrera más antigua que permanece en el calendario, ya que llega ya a su 121ª edición. La corredora tiene ya 70 años, pero tomará la salida (y seguramente alcanzará la meta) en una distancia en la que acredita una mejor marca de 2.51 horas.
Pero la marca será esta vez lo de menos. Lo importante será la celebración de una mujer que abrió las puertas a sus congéneres, que cada vez más se incorporan a esa exigente distancia. En el último maratón de Barcelona, el pasado 12 de marzo, por ejemplo, el 20% de los inscritos eran mujeres.
