REAL MADRID 3: Casillas; Michel Salgado, Pavón, Samuel, Roberto Carlos; Figo (Solari, m.80), Helguera, Beckham, Zidane; Raúl (Guti, m.64) y Ronaldo (Morientes, m.64).

WISLA CRACOVIA 1: Majdan; Basczynski, Klos, Glowazki, Mijailovic (Stolarczyk, m.46); Zienczuk, Kukielka (Kwiek, m.84), Cantoro, Gorawski; Frankowski (Kuzba, m.58) y Zurawski.

GOLES: 1-0, m.3: Ronaldo. 2-0, m.31: Ronaldo. 3-0, m.84: Pavón. 3-1, m.89: Gorawski.

ARBITRO: Kim Milton Nielsen (DIN). Sin problemas en un encuentro de guante blanco. Mostró cartulinas amarillas a Zurawski y Kukielka por el Wisla.

El Madrid saldó su deuda de la pasada temporada cuando en un final para olvidar perdió todos los títulos y el acceso directo a la Liga de Campeones, que certificó goleando al Wisla de Cracovia en un partido que se convirtió en la fiesta de Zidane , que mostró todo su repertorio con Ronaldo de invitado especial.

Era el día del estreno. Obligado a cambiar el Trofeo Bernabéu por un partido vital, el Real Madrid se presentaba ante una afición que no falló, con una única cara nueva en el once titular, el argentino Walter Samuel.

Junto a él, se estrenaba desde el banquillo José Antonio Camacho, alejado de todo tipo de romanticismo pero con la emoción de regresar a su casa. Como Morientes, héroe del partido de ida con dos goles que sentenciaban la eliminatoria, que recibió un caluroso recibimiento con ovación de bienvenida.

Pese a la clara ventaja, Camacho no se fió y repitió once. El año en el que se anuncian las deseadas rotaciones y a la espera de Owen y Woodgate, el técnico madridista diseñó un equipo con el objetivo de lavar la imagen del final de temporada.

Lo hizo nada más comenzar el partido. En el primer minuto Luis Figo avisaba de su estado desbordando con facilidad a su marca. Dos minutos después una nueva internada suya acababa en un pase medido a Ronaldo que a placer hacía el primero.

No falló Ronaldo. Un centro medido de Michel Salgado en el minuto 31 lo remachaba a la red con total tranquilidad el brasileño que marcaba el segundo tanto de su apuesta particular de 35 para la temporada que se inicia. Era el 2-0. En la segunda parte apenas hubo nada, con todo decidido. A anotar para la estadística el gol de Pavón, el tanto del honor del Wisla y la entrada en el campo del ovacionado Morientes. Misión cumplida.