Plasencia y Cacereño tendrán que entrenar el primer día del año. El día siguiente, el 2, juegan el derbi de la Tercera ante la imposibilidad de que el estadio de la Ciudad Deportiva pueda utilizarse el día 30 por la disputa del llamado ´Mundialito´ de escuelas de fútbol.

El entrenador del Cacereño y ex del Plasencia, Miguel Angel Mateos, confirmó ayer que, definitivamente, el partido se jugará el día 30 a partir de las cinco de la tarde. "No ha podido ser", se lamentó el técnico que, como los jugadores de ambos equipos, hubiera preferido tener una Nochevieja tranquila.

Mateos, como en su trabajo del día a día en el Cacereño, se resigna ante noticias negativas, pese a que el domingo su equipo hiciera un buen partido con victoria (3-0) ante el Villafranca. La acumulación de bajas en su equipo ronda la decena, entre expulsiones y lesiones, algunas de larga duración. El club ya lo ha dejado claro: será difícil que haya fichajes y se tirará del equipo juvenil. Sergio, Emilio Gil y el mexicano Eduardo aún tienen que esperar para poder reaparecer, al igual que Copito o Marcos, sin contar con los problemas habituales de otros.

Mateos reconoce que tiene una plantilla "muy limitada, pero pelearemos a muerte lo que podamos", pese a que se niegue a insistir sobre fichajes: ya lo ha hecho durante los últimos dos meses y la táctica . A su antecesor, Bernardo Plaza, al menos, le llegaron dos futbolistas en el mercado de invierno: los hermanos Ray y Paco Ortega.