CAI HUESCA (20+19+16+11): Rodríguez (5), Gómez (10), Ortega (10), Mons (3), Wayatte (13) -equipo inicial- Castelló (4), Matalí (19), Beran (2) y Prat.

PLASENCIA GALCO (11+23+29+11): Mario Fernandes (3), Rubén Ibeas (3), Fort (10), Martin (2) y Jason Blair (22) -equipo inicial- Zoller (9), Garrote (3), Suárez (10), Lledó (2) y Conejero (-).

ARBITROS: González y Vázquez, de los colegios asturianos y catalán. Sin excluidos en ningún equipo.

INCIDENCIAS: Partido correspondiente a la jornada número 30 de la Liga LEB Plata.

El CAI Huesca y el Plasencia Galco ofrecieron un bonito espectáculo de baloncesto en el que se impuso al final el conjunto aragonés, aunque en la última jugada, que resultó ser la decisiva de cara al marcador, el equipo extremeño reclamó amargamente una falta que no fue señalada por los árbitros y que supuso la victoria de los oscenses que buscaban la clasificación y superar al Plasencia en la tabla.

De este modo, los extremeños son ahora novenos, con 16 victorias, las mismas que sus rivales de ayer, dos por delante del Tarragona, la principal amenaza, que se puede colocar a solamente una si vence en la pista del colista Santa Pola en el partido que disputen hoy.

El primer cuarto comenzó muy metido el CAI en el partido y aprovechó basando su juego en los hombres interiores, Ortega y el explacentino Nygel Wyatte que anotaban con facilidad y además en defensa ajustaban muy bien creando muchos problemas al equipo que entrena Ñete Bohigas.

El Plasencia no acertaba con el ritmo del partido y sobre todo Blair, que sólo anoto una canasta en el primer cuarto, aunque después se fue entonando y . Todo esto hizo que el conjunto oscense finalizará con una ventaja de 9 puntos que fueron renta suficiente para los minutos posteriores, ya que la mantuvo hasta prácticamente hasta el final del tercer cuarto.

En el segundo cuarto, el juego se volvió un tanto irregular con rachas de uno y otro equipo, que rápidamente eran cortadas, por lo que el marcador siempre fue favorable al equipo local llegándose al descanso con 39-34, siendo Suárez quien le dio más vida a su equipo igualando en todos los sentidos, con un Rubén Ibeas en su línea de los últimos encuentro: bastante desacertado en el lanzamiento.

SEGUNDA MITAD Tras el descanso Plasencia intensificó su ritmo por lo que neutralizó la desventaja que llevaba en el marcador llevando a ponerse por delante en el minuto 27 (46-47) con una presión por toda la pista por parte de los extremeños, ya que el partido se igualaba y con ello creaba cierta incertidumbre en el equipo oscense.

El equipo visitante luchó siempre ante un cuadro local que tuvo en Matalí a su mejor hombre, sobre todo en ataque, con sus lanzamientos exteriores que hicieron mucho daño y que no pudieron ser interceptados en los momentos claves.

MUCHO NERVIOSISMO En el último cuarto los nervios se apoderaron del Plasencia que cometió mas errores ya que tan solo Blair fue el más inspirado, pero fue perfectamente marcado por los locales que lograron frenarlo sin hacer apenas faltas.

En el momento decisivo, la balanza arbitral se inclinó del lado de los locales, que festejaron el triunfo como si fuese una final.

De todas maneras, el Plasencia sigue dependiendo de sí mismo. Pendiente de lo que haga el Tarragona en la pista del colista de la LEB Plata, el Santa Pola, restan cuatro jornadas y los de Ñete Bohigas deben estar en la eliminatoria puente hacia la final a cuatro. Todo esto, si la lógica se cumple, aunque el calendario para los extremeños se torna harto complicado en los próximos encuentros.