AGUAS DE CALPE: (15+10+19+20) Sánchez (8), Virgil (22), Mills (17), Dentís (2) y Maile (3) --cinco inicial-- Martín (4), Ivars (-), Torres (5), Navalón (3).

PLASENCIA GALCO: (17+10+11+20) Howard Brown (21), Javi Simón (8), Juanjo Triguero (8), García (6) y Couthbert (10) --cinco inicial-- Javi Pérez (2), Canals (1), Prats (-), Alvaro Palacios (2).

ARBITROS: De Lucas y Beys. Excluyeron por cinco faltas personales al jugador del Plasencia, Triguero, en el minuto 38.

INCIDENCIAS: Partido correspondiente a la séptima jornada de la Liga LEB.

El Plasencia Galco no supo jugar los dos últimos y decisivos minutos del partido ante el Aguas de Calpe, un rival al que permitió de esta forma sumar su primer triunfo de la temporada tras imponerse por 64-58. Los jerteños realizaron un trabajo serio que no tuvo respuesta por parte de los jugadores cuando llegó el momento definitivo.

El partido comenzó con numerosas imprecisiones por parte de los dos equipos, aunque los locales, apoyados en su americano Virgil dominaban el rebote y el marcador en los primeros compases del choque.

La defensa individual del plasencia empezó a funcionar y propició un parcial de 0-5, con lo que el equipo visitante remontó el marcador, con una brillante actuación de Victor Couthbert al contragolpe.

Los alicantinos, que no conocían la victoria en el campeonato, afrontaron este primer cuarto con el mismo quinteto sobre la cancha para tratar de mantener sus opciones.

El partido entró en una fase de intercambio de canastas, con constantes alternativas en el marcador, aunque una canasta de Javi Simón sobre la bocina deshizo el empate al final del primer cuarto favor del Plasencia (15-17).

VENTAJA VISITANTE En el segundo cuarto, el rebote ofensivo del Plasencia le permitió mantenerse arriba en el marcador, hasta que una canasta al contraataque de Howard Brown obligó al técnico local, Eduardo Clavero, a solicitar un tiempo muerto con 17-21 en el marcador.

Un parcial de 4-0 para el Calpe, con dos canastas consecutivas de Martín, igualaron de nuevo el partido, con los alicantinos ejerciendo una presión a todo la cancha.

Sin embargo, los puntos y la intimidación del pívot visitante Triguero ayudaban a mantener al equipo placentino totalmente metido en un partido, marcado en este segundo capítulo por las fuertes defensas de ambos conjuntos que sólo dejaron anotar diez puntos a sus rival, por lo que se llegó al descanso con una exigua renta de dos puntos (25-27) para el Plasencia.

Tras el paso por los vestuarios, el equipo de Calpe comenzó más centrado y efectivo en ataque lo que le permitió conseguir un parcial de 8-0 (33-27) en apenas dos minutos, ante un Plasencia muy nervioso, que cometió dos faltas en ataque consecutivas, aunque una canasta de Howard Brown y un triple de García estrecharon de nuevo las diferencias en el electrónico.

El americano Mills, que debutaba con el Calpe en este partido, comenzó a aportar puntos para su equipo, lo que unido a la buena dirección del base Sánchez devolvió la renta de cinco puntos al Calpe a tres minutos para conclusión del tercer cuarto. Los puntos del pívot local Virgil propiciaron una ventaja de nueve puntos (44-35) a 17 segundos para el final, pero tres tiros libres consecutivos anotados por Simón dejó la diferencia en seis puntos al final del tercer acto (44-38).

EL ACTO DEFINITIVO En el comienzo del último cuarto, el Calpe consiguió la máxima renta de ocho puntos, aunque dos canasta consecutivas de Alvaro Palacios y el cansancio de base local Sánchez, que jugó todo el partido, permitió al Plasencia empatar a 53 puntos, a tres minutos para la conclusión. El público comenzó a creer en el primer éxito local.

Los puntos de Virgil rivalizaron con los triples de Simón que puso a su equipo un punto arriba a minuto y medio del final (57-58).

Sin embargo, en el momento más decisivo del choque el Plasencia jugó excesivamente precipitado. Un error de Simón bajo canasta permitió a los alicantinos coger tres puntos de ventaja.

Palacios falló un triple en la jugada siguiente, que hubiera supuesto el empate, y cometió una falta sobre Mills, que anotó uno de los dos tiros libres, aunque un robo de balón en la último posesión del Plasencia permitió a Sánchez anotar sobre la bocina el 64-58 final.