PLASENCIA GALCO: Garrote (12), Nacho Fort (2),Quique Suárez (5), Martin (20), Jason Blair (19) --cinco inicial-- Mark Zoller (11) Ibeas (6), Mario Fernandes (4), Lledó (0), Conejero (0).

IMAJE SABADELL: Pino (9), Rafael Luis (20), Marc Sobrepera (4), Marc Solá (15), Guzmán (8) --cinco inicial-- Xavi Girau (2), Enrique Moraga (2) y Marco Meire (-).

MARCADOR POR CUARTOS: 23-19, 37-27 (descanso), 64-48 y 79-60 (final).

ARBITROS: Rial y Martin. Sin eliminados.

INCIDENCIAS: Partido de la cuarta jornada de la Liga LEB Plata. Buen ambiente en la grada en la mejor entrada de la temporada.

El Plasencia suma y sigue. Ayer, tras un partido muy duro, se desembarazó del Sabadell y siguió invicto en la competición, manteniendo la plaza de líder con sus cuatro triunfos en otros tantos encuentros.

Empezó el duelo con un Sabadell más intenso que los locales, y también más acertado, lo que se reflejaba con un 4-11. Poco a poco, el Plasencia fue asentándose, tanto en defensa como en rebote, pudiendo correr contraataques y llegando al 14-15 tras un triple de Blair (min. 7).

Empezaron ahí las primeras rotaciones de Juan Pablo Márquez (nueve jugadores en este primer cuarto), poniéndose por encima con un 21-19.

En el segundo cuarto, más impreciso al inicio, empató el Sabadell (23-23), pero un triple de Ibeas y una canasta de Blair pusieron las cosas en su sitio. El partido se volvió bronco.

El Plasencia no se desconcertó ni perdió el ritmo, con un 32-27 a falta de 3:20. Con un Martin muy activo, el cuadro local se puso muy arriba y en franquía (37-27 al descanso).

SEGUNDA PARTE En el segundo tiempo, los dos equipos salieron con mucha más intensidad, sobre todo en ataque, lo cual favoreció un intercambio de canastas con un parcial de 10-10 en los cinco primeros minutos. Zoller vuelve a la pista y la tónica de los últimos minutos fue el buen juego de equipo.

El partido estaba encarrillado, con una máxima diferencia de 14 puntos a falta de 2:53. A pesar del tiempo muerto, no hubo reacción visitantes (64-48, final del tercer cuarto).

El último cuarto fue de lucha de los visitantes, pero Plasencia no bajó la intensidad, con lo que se llegó a un plácido final con una seriedad tremenda.