El Plasencia Galco se mide esta noche al líder de la Liga LEB en cancha leonesa (21.00 horas). El equipo espera que el Palacio de los Deportes siga siendo talismán , ya que sus dos únicas visitas se han saldado con victoria, y poder así tomar un respiro en la lucha por la permanencia en la categoría. El León se le da especialmente bien a los placentinos, que ya vencieron en la primera vuelta de manera contundente (89-70). Fue uno de los mejores partidos de esta temporada.

La victoria es muy necesaria, al margen de la categoría del rival y los precedentes. Cinco derrotas consecutivas han metido de lleno al Plasencia en la zona baja de la clasificación. Además, supondría un impulso de cara los dos partidos de la próxima semana, ante Melilla (casa) y Huelva (fuera).

CONFIANZA "Yo voy partido a partido y ahora mismo sólo pienso en el León. Aunque sea el líder, es posible ganarles y sería una victoria importantísima. Cuando pasemos este encuentro, miraremos al siguiente", aventura Dani García, que afirma que su equipo se encuentra "en buenas condiciones físicamente y sin nervios ante la situación en la clasificación".

Gran parte de las esperanzas radican en que James Forrest, el último en llegar en sustitución de Raheim Brown, continúe con su progresión. Hoy tendrá una dura prueba ante los pívots locales, Barnes y Higgins. También preocupa el juego exterior leonés, con el acierto anotador de Bulfoni, Silas Mills y el cacereño José María Panadero. El base titular es Juanjo Bernabé, jugador del Plasencia hace diez años y que desde hace apenas un mes cuenta con otro ex-ACB, Stephane Dumas, como ayuda en la dirección.

A pesar de la próximidad geográfica, el Plasencia no tendrá tanto apoyo desde la grada como en anteriores ocasiones en León, al ser diario. La afición reserva sus fuerzas para el desplazamiento organizado a Huelva, aunque algunos seguidores sí harán el viaje en sus coches.

Manejar la presión en esta recta final liguera será la clave. Según García, en el vestuario reina la tranquilidad y el ánimo.