El infortunio parece haberse cebado con Kerry Blackshear, ya que el alero de Plasencia Extremadura ha sufrido en el periodo de un mes la pérdida de dos de sus seres más queridos. El episodio más doloroso ha sido la muerte de su hermano, de tan solo 28 años, a causa de un infarto de miocardio el pasado sábado. Recibió la noticia al terminar el partido ante el Canasta Jerez y el domingo tomó el avión que le trasladó Florida, donde le esperaba su familia.

La directiva directiva placentina le ha concedido los días necesarios y más teniendo en cuenta que hace un mes también se produjo la muerte de su padre, aunque en esa vez no fue al funeral.

El Plasencia Extremadura parte esta mañana hacia Huesca también con la duda de Fran Robles, ya que no ha podido entrenar en toda la semana debido a unos problemas en su rodilla derecha.