La derrota ante el Xuven Cambados (70-83) ha dejado muy tocado al Extremadura Plasencia en su lucha por la permanencia en la LEB Plata. Tanto es así que incluso podría descender matemáticamente el próximo sábado si pierde en su visita a otro de los implicados en la zona baja, el Agustinos Leclerc de León.

En todo caso, los placentinos ya no dependen de sí mismos para conservar la categoría que recuperaron el pasado verano por vía administrativa. Con diez triunfos son decimoterceros, empatados con el propio Agustinos, y están a uno tanto del Cambados como del Baskonia, cuyas derrotas tiene que esperar como mínimo el próximo fin de semana. La situación se ha puesto realmente cruda para el conjunto de Dani García, cuyo regreso al banquillo placentino de momento registra un balance de un partido ganado y tres perdidos.

El representante extremeño en la tercera división nacional se agarrará a sus últimas opciones en estas dos jornadas que restan. Después del partido de León le espera despedir la temporada ante el Ávila en su pabellón, espera que aún con opciones.