PLASENCIA 69: Simón (8), Palacios (4), Brown (13), Javi Pérez (12), Triguero (16) --cinco inicial-- Canals (3), Egidio (-), Adrián García (2), Francis Sánchez (8), Aleix Prat (3).

MURCIA 81 : Andre Turner (20), Gómez (9), Mar§al (8), Sánchez Bernat (8), Cuthrell (9) --cinco inicial-- Drame (-), Sala (8), Bárcenas (12), Valmont (7), Garrido (-).

áRBITROS: Bardají y Sánchez. Eliminados: Brown (min.38) y Gómez (38).

MARCADOR POR CUARTOS: 21-17, 38-33 (descanso), 47-55 y 69-81 (final).

INCIDENCIAS: Segundo partido de Liga LEB y buen ambiente en el pabellón jerteño.

El Plasencia cosechó su segunda derrota liguera en el primer encuentro disputado en su feudo. Aunque el entrenador local, Dani García, no se escudase en ello, la falta de un americano, tras el despido de Nicholas (ayer hizo oficial el club la contratación de su sustituto, Víctor Cuthbert), además de los problemas de Triguero, pudieron ser clave en el desenlace final.

Pese a ello, el propio Triguero fue el mejor del partido, sin que se pudiera notar sus mareos de la semana, y de hecho firmó unas estadísticas sobresalientes, con 16 puntos y 15 rebotes.

El Polaris Murcia, uno de los candidatos a subir a la ACB, se aprovechó de las carencias locales, sobre todo a partir en el segundo tiempo, cuando liquidó el encuentro amparado en su profundidad de banquillo, muy superior a la placentina.

Pero antes de todo ello, el Plasencia se mostró muy serio y concentrado, anotando todas sus llegadas al ataque y defendiendo casi a la perfección (15-9, minuto 6). Ello hizo que el técnico visitante reorganizara a los suyos en el segundo cuarto. El final del primer cuarto terminó con un desentono arbitral, queriendo equiparar las faltas de uno y otro equipo. El 21-17 ilusionaba a los placentinos, que parecían revivir los momentos más mágicos de la pasada temporada.

En el segundo cuarto, las defensas parecían superiores a los ataques. Un parcial de 2-3 en cuatro minutos daba muestra de la primacía de las defensas. El mejor momento local se empezó a fraguar con jugadas consecutivas de anotación, con una máxima diferencia de nueve puntos (29-20, minuto 15).

ROTACIONES A partir de ahí, las rotaciones en el equipo placentino parecían notarse y los murcianos ponían el equilibrio de nuevo (31-31, minuto 18). Tras el reajuste, los de Dani García se volvían a separar con un 38-33 gracias, sobre todo, a un gran Javi Pérez que, con 10 puntos, era el jugador clave.

En el segundo tiempo, la zona murciana se atragantó a los placentinos. Y a ello hay que unir que en la pista había un mago, Andre Turner que, con 18 puntos y una dirección magistral a sus 41 años, volteó el marcador. A partir del minuto 24 (43-45) no dejaría de marcar las diferencias. La cuarta personal de Javi Pérez fue también determinante para frenar la escalada.

El parcial de 9-22 en el tercer cuarto resultó aleccionador para los locales. La falta de puntería en el juego exterior (7 de 29) de los locales hizo el resto. El último cuarto tuvo un atisbo de reacción local, que llegó a ponerse a cuatro, con varias decisiones arbitrales polémicas, acabó con la esperanza placentina.