ARACENA PONTS 92 (25+22+20+25): Marcos, Robertson (8), Deveaux (25), Larraz (19), Talaverón (15) -cinco inicial-, Sotomayor, Jiménez (3), Jobacho, Sada (7), Fey (4) y Matalí (11).
PLASENCIA GALCO 78 (17+22+22+17): Jauma Morales (24), Pérez (9), Canals (6), Lledó (12), Jiri Okac (17) -cinco inicial- José María Santos, Rodríguez, Robles, Beltrán (2) y Jorge Otero (8).
ARBITROS: Pérez y Quintas. Sin eliminados.
INCIDENCIAS: Duelo entre equipos situados en los primeros puestos.
El Plasencia vio truncada su excelente serie de siete victorias consecutivas en la visita que rindió ayer a la pista de un Aracena de Ponts que ratificó su condición de equipo revelación jugando ante el equipo pacense el mejor partido de la temporada y frente a una grada entregada y cuyo apoyo fue determinante para la victoria de los leridanos (92-78).
Los dos parciales del primer y cuarto tiempos fueron de un claro dominio del conjunto de Ponts que se hizo con una ventaja de 8 puntos en ambos.
Segundo y tercer cuartos estuvieron marcador por una mayor igualdad que a la postre quedo reflejada en los parciales de estos periodos de diez minutos 22-22 y 20-22, este último correspondiente a los terceros 10 minutos y el único en el que el equipo extremeño acabó con el parcial favorable a sus interesas.
El equipo que entrena Ñete Bohigas chocó siempre con la inspiración de un Deveaux muy acertado en el primer cuarto en el que los locales se escaparon de 8 puntos.
El poderío interior de Okac (el mejor de los extremeños) encontraba respuesta en el trabajo de Robertson y Talaverón y los locales conseguían sus primeras ventajas en el marcador (25-17 en el primer cuarto).
En el segundo, el Plasencia planteó una serie de defensas alternativas que el Aracena rompió una y otra vez gracias al acierto de Larraz y Deveaux en el perímetro y las acciones interiores de Talaverón y Robertson. De esta forma, los extremeños se fueron al descanso con una desventaja de ocho puntos (47-39).
SEGUNDA PARTE
En la reanudación, Bohigas continuó alternando una defensa zonal 1-3-1 con una 2-3 y presión a tres cuartos de pista, pero los locales seguían en estado de gracia y ponían en pie a un pabellón que vibró como nunca con las evoluciones de su equipo.
Pese a todo, las acciones de Morales y Okac permitieron ajustar un poco el partido hasta el 67-61 con el que se afrontó el último periodo. Pero reapareció la figura de Deveaux para sentenciar el encuentro y no dar ninguna opción a los extremeños, que aunque lo intentaron se encontraron con un rival intratable.
Además, Bohigas echó en falta los triples de Morales, que pese a ser el máximo anotador extremeño firmó un 2 de 5 desde la línea de 6,25, y de Lledó, que acabó con un 0 de 4.
