El exentrenador del Cacereño Bernardo Plaza prefiere no mirar atrás. La crisis deportiva del equipo, perdido en la zona de nadie de la Tercera, sí provoca la reflexión del técnico, ahora sin trabajo en los banquillos. "¿Extrañado por la marcha del Cacereño?", pregunta el periodista. Plaza, prudente, se limita a responder: "Esa sí que es una buena pregunta".

Sus razones para no opinar se deben, dice, "a no tener conocimiento de lo que está pasando en el club y el equipo". Tampoco quiere valorar si la situación deportiva este año puede parecerse en algo a la que él vivió la temporada pasada: "Entrar en comparaciones no tiene mucho sentido. Estoy seguro de que tratarán de hacerlo lo mejor posible y son los que pueden analizar la situación. Tengo mi propia opinión y les deseo lo mejor", asegura en su mensaje al club y a la plantilla.

Pero su análisis del grupo extremeño desvela que el Cacereño debería estar luchando por disputar la fase de ascenso. En concreto, señala, en la lucha por la cuarta plaza ya que, asegura, "hay tres equipos por encima del resto, que son Cerro de Reyes, Villanovense y Don Benito". Por eso entiende que su exequipo debería estar en otro ramillete de cuatro o cinco que opten por la última plaza en juego: Sporting Villanueva, Imperio, Villafranca, Plasencia y... Cacereño. "Debe optar a ello por nombre. Al principio --de temporada-- lo que plantearon fue eso, ¿no?, entrar en liguilla", dice.

A pesar de ello, el técnico repite que, aunque a su exequipo no le estén saliendo bien las cosas, puede remontar el vuelo. "Veremos qué pasa de aquí a final de temporada", indica. Reconoce que sólo ha visto al Cacereño una vez esta temporada, frente al Imperio, y que le causó buenas sensaciones: "Aprovecharon sus ocasiones y merecieron ganar".

Ni una concesión más. Plaza reitera que la lucha por ese cuarto puesto será dura, ya que vaticina que otros equipos entrarán en la pelea y pone al Villafranca como ejemplo. "La liga es competitiva", subraya.