Es una de las sensaciones de la temporada en el fútbol extremeño. El Moralo Club Polideportivo llama la atención por su empeño, y capacidad, para seguir en el primer puesto de la clasificación desde que comenzó la liga en el grupo XIV de la Tercera División; bien en solitario durante cinco jornadas o colíder con otros equipos como ahora con el Cacereño. Y al frente del club está, como puede imaginarse, un presidente feliz. Hoy se cumplen justamente dos meses desde que el 8 de septiembre, en asamblea de aficionados, se hacía oficial el nombramiento de Horacio López Gil como presidente. Aunque realmente lleva algo más de un año ejerciendo como tal y lo que se hizo ese día fue el traspaso de poderes con el saliente Fran Núñez.

Precisamente la amistad entre ambos fue lo que le llevó al Moralo junto a un grupo de colaboradores que finalmente decidieron que él fuera el presidente: «Fran nos pidió ayuda y así llegue al club junto a mi hermano Michel y Tinín, López, Paco, Pascasio, Sevi y Carlos Sánchez -cuenta López-- con la intención de sanear la economía cumpliendo con los pagos y estructurar el club de nuevo desde la base». Otras personas se han ido incorporando al grupo directivo como Felipe del Castillo, al que López alaba «por su empeño y esfuerzo».

Estar ahora en las alturas del torneo ya no es casualidad para el presidente moralo «empezó siendo un pequeño sueño, parecía que estábamos de paso, pero la ilusión ha ido creciendo en todos --dice-- un buen ejemplo es que el domingo en Calamonte había un grupo de aficionados desplazados para ver al equipo, algo que en viajes largos no pasaba desde hace mucho tiempo».

Horacio López, 46 años, empresario de hostelería, nació en Benavente (Zamora) aunque «siempre digo que soy de Navalmoral», afirma. Tiene una hermana famosa, Marta López, habitual en la televisión tras su paso por Gran Hermano 2. Su familia le apoya de cerca: su hermano Michel en la directiva, su hijo mayor Mario en el Moralo juvenil y el pequeño Paulo en los benjamines del Rayo Vallecano, «además de mi pareja Angélica y sus hijas, que me aguantan las ausencias en las muchas horas que hay que dedicar a esto».

Incidente en Cáceres

Fiel aficionado, y socio, del Atlético de Madrid, recuerda sus inicios en el Moralo precisamente como seguidor «fui uno de los fundadores, tras el primer ascenso a Segunda División B, de las Brigadas Verdiblancas -cuenta--, que ahora han vuelto al Municipal, y colaboré con la directiva de Ramón Barbado».

Precisamente en su relación con otros aficionados está su peor momento de esta feliz temporada «no fue agradable el incidente en el estadio del Cacereño -dice--, pero en mi cargo no está aguantar ciertas cosas».

Por otro lado, se siente muy orgulloso de la relación que ahora tiene el club con el resto de la sociedad morala; homenaje a las Fuerzas de Orden Público o a las Asociaciones Oncológicas, participación en la Marcha Rosa y este pasado lunes en una concentración de apoyo a la familia amenazada de desahucio por el impuesto de sucesiones, herederos precisamente de Basilio Rebate, expresidente del Moralo. Y también presume de «la unión que promovemos en el fútbol de Navalmoral para que todas las escuelas de base tengan como escalafón final que sus jugadores lleguen al Moralo».

¿Y hasta donde llegarán esta temporada? Horacio López no especula «ya que estamos aquí vamos a pelear hasta el final». Este domingo visita Navalmoral el Coria (17.00 horas). Es un partido de altura que el club local plantea con ambición pensando en una gran entrada de aficionados: ‘objetivo 2.000’.