Manolo Flores perdió su primer partido desde que sustituyó a Joan Montes al frente del Barcelona y lo hizo en la Euroliga ante un Scavolini que fue mejor en los momentos decisivos, porque el marcador estaba equilibrado (70-70), a sólo cincuenta segundos del final.

Los barcelonistas, no hace mucho especialistas en esos compases decisivos de máxima tensión, desaprovecharon tras un tiro libre de Frosini (71-70) dos posesiones y un último tiro forzado de Juan Carlos Navarro para hacerse con el triunfo. El problema es que ninguna de las estrellas del Barcelona, especialmente Dejan Bodiroga, al que buscaban sus compañeros en esos momentos decisivos, fue capaz de anotar en alguno de esos dos ataques y el lanzamiento final de Navarro era una lotería que esta vez no tocó, para desgracia del técnico extremeño.

BIEN EL MADRID Mientras tanto, el Real Madrid tampoco concretó. Anoche tuvo una gran oportunidad de acabar con el casi inexpugnable CSKA de Moscú, pero acabó cediendo en la prórroga por un solo punto (94-95). Este traspié, en cierto modo lógico, y el de la semana anterior ante el Barcelona hacen que los madridistas lo sigan teniendo muy cuesta arriba para llegar a lo más alto.