Con una frialdad inesperada, incluso con un tono que estaba más cerca de la bordería que de la simpatía al intentar hablar con ellos, quizás por la negativa del Cacereño a adelantar el partido, se presentó el Alcorcón en Cáceres. La expedición se alojó en el hotel Barceló V Centenario y allí tuvo una larga sesión de fútbol, únicamente interrumpida por la cena. Jugadores y cuerpo técnico vieron en el hall del hotel el Barcelona-Mallorca y posteriormente el derbi madrileño. Muchos de ellos celebraron el gol del Mallorca que suponía el empate a uno. El técnico, Juan Antonio Anquela también lo hacía, aunque luego con una sonrisa pícara decía: "No es porque sea del Madrid, yo soy del Alcorcón. Al Madrid le veré luego, pero no para sacar conclusiones ni ver cómo afrontar nuestro partido contra ellos. Es un partido que no me preocupa porque siguiendo la lógica nos tendrían que eliminar".

El técnico, al que se le veía tenso, tal vez por el partido de esta tarde o quizás, por el cabreo de tener que jugar sólo 48 horas antes de enfrentarse al Real Madrid en Copa, no quiere hacer demasiadas referencias a este duelo y centrarse en el envite liguero ante el Cacereño. "Yo sólo pienso en el encuentro de mañana --por hoy--; en el Madrid pensaré cuando el árbitro pite el final. El del Cacereño es un partido muy importante para nosotros", afirma el técnico.

Mentaliza a los jugadores

Aunque él pueda estar concienciado de ello, es consciente de que a sus jugadores se les puede ir la cabeza pensando en jugar en el Bernabéu. "Sé que todos querrán jugar el martes y que alguno quizás lleva mucho tiempo pensando en ese partido, pero yo les he recalcado mucha esta semana que sólo podemos pensar en el Cacereño, es mi misión".

Alguno de los jugadores reconocía lo apetecible que es el partido del martes. Uno de ellos, el central Borja Gómez, otro de los que celebraba el gol del Mallorca, se atrevía a decir: "Si sólo pudiera jugar un partido y me dieran a elegir entre estos dos, indudablemente eligiría el del Bernabéu. En campos de Segunda B jugamos cada domingo, pero contra el Madrid sólo se juega una vez en la vida". Aunque ante la cercanía del entrenador matizó: "Pero nos tenemos que centrar en el Cacereño y luego ya pensar en el Madrid".

Once de gala

Juan Carlos Anquela aseguró que no reservará a nadie pensando en el partido de Copa, "sacaré un once muy parecido al que le ganó al Madrid. Tenemos 18 jugadores y no estamos para elegir", comentó. Dice tener estudiado al Cacereño y que lo que más le preocupa "es el bloque. Yo no me fijo en las individualidades". El entrenador del Alcorcón, hermano de Fernando Anquela, jugador del Cacereño en los años 80, afirma no haber hablado con su hermano de ese tema "porque es algo de lo que ya ha pasado mucho tiempo y a lo que no le doy más importancia".