Tomás llegó el pasado año en mercado invernal a reforzar la defensa del Cacereño. La experiencia y colocación del ex del Salamanca le convirtieron en imprescindible. Esta temporada todo parecía que había comenzado bien para él, pero una lesión en el encuentro ante el Vecindario le ha mantenido apartado del equipo.

Sin embargo, la buena noticia llegó definitivamente ayer. "No me he notado nada. He estado 20 minutos en el partidillo y ya estoy ahí, para entrar". Tomás no sabe si estará en la convocatoria ante el Coruxo, pero él tiene ya buenas sensaciones. "Salí del equipo por una inoportuna lesión y ahora voy a intentar ponérselo difícil al míster". El central no da por hecha ya su reaparición, pero se muestra optimista.

Sin embargo, no es precisamente el puesto del centro de la defensa el que atraviese ahora los mayores problemas. Mario Carrizosa y el canterano Gonzalo son los titulares, con Rives a la expectativa. "Gonzalo es un defensa interesante, lo está haciendo muy bien", dice Tomás de quien ocupa ahora su puesto. En un mes cumplirá un año en el Cacereño, donde se encuentra "muy feliz".

El charro espera que el equipo reaccione, sobre todo en los resultados. "En Leganés debimos ganar 0-3, después cuesta mucho salir de ahí abajo, pero yo tengo mucha confianza", añade optimista. Su experiencia --durante años fue capitán del Salamanca en Segunda-- le hace ser cauto a la hora de establecer comparaciones en relación al equipo del año pasado y dice: "ahora tenemos solo que pensar en salir de lo rojo".