Los problemas físicos de varios de los jugadores, especialmente defensas, condicionarán la primera alineación de Angel Marcos en el Cacereño. El sustituto de Angel Alcázar anunció ayer que iba a hacer "varios retoques" en la concepción futbolística y de nombres de su equipo en relación a la anterior etapa. Sin embargo, las molestias de Tito, Cazorla, Diego y Roberto, además de la baja de Chiqui, harán que el dibujo de Marcos esté aún por concretarse de cara al encuentro de mañana (19.00 horas) en el Carlos Tartiere Oviedo.

Marcos apurará antes de viajar a Asturias para ver la evolución de los lesionados. La mejor noticia de las últimas horas ha sido la recuperación total de Borja, del que el técnico informó que jugará en el filial para coger el ritmo de competición casi siete meses después de producirse una grave lesión.

La sensación del borrón y cuenta nueva se ha ido acrecentando a lo largo de la semana. Para mañana, la receta está clara: intentar una victoria que "nos quite la ansiedad", como dijo Marcos, quien recordó que esa sensación ya no la tendrán los también extremeños Cerro y Villanovense tras lograr el primer triunfo.

"Prefiero la verticalidad antes que la horizontalidad, estar más cerca de la portería rival". He ahí la declaración de intenciones.