El Puebla se volvió ayer de vacío de su visita a Lezama, donde perdió ante el Athletic de Bilbao (3-1) en un partido aplazado en su día en el que hizo méritos para puntuar.

Las extremeñas firmaron un gran segundo tiempo, en el que se pusieron 2-1 (gol de Lupe en el minuto 4), pero la sentencia del encuentro llegó cuando mejor lo hacían las poblanchinas. El presidente, José Luis Hernández, se quejaba anoche de un fuera de juego "de cinco metros" que propició la acción anterior del penalti que provocó el 3-1 definitivo.

El cuadro extremeño, además, vio cómo el árbitro expulsaba a una de sus mejores jugadoras, Lourdes. El Puebla continúa así en la sexta posición de la tabla, con un total de 31 puntos en su haber.