Que sí joder, que vamos a ascender», fue el grito más repetido en la afición blanquinegra, que reconoció el inmenso esfuerzo de sus jugadores aunque no pudieran batir la meta calagurritana. Gran ambiente en las gradas con más de 7.000 espectadores que no pararon de animar pese a los más de 40 grados y buena relación con los apenas 50 aficionados visitantes, con los que los pacenses coincidieron en las horas previas en los bares, demostrando lo bonito que puede ser el fútbol con cordialidad. Los riojanos llegaron en autobús y ocuparon una zona de preferencia.

Y de los protagonistas de la grada, a los del banquillo. Juan Marrero, técnico del Badajoz, subrayó que el partido estuvo «marcado por el calor, el campo estaba muy alto y dificultaba el juego combinativo. También marcado por el corazón y el empuje de mi equipo en la segunda parte en donde sólo se ha visto un equipo con muchas ocasiones que en un play-off no puedes desaprovechar. Me quedo con la respuesta del equipo tras el descanso en donde necesitábamos subir uno o dos peldaños. Competiremos igual en Calahorra y vistas las estadísticas hemos marcado en todos los partidos fuera...».

Del encuentro de ayer, Marrero se queda con que su rival «es un buen equipo y si no hemos marcado también ha sido por mérito de ellos. Tiene buen juego directo y a balón parado tienen un potencial bueno. Para marcar a nosotros nos ha faltado precisión, finalización... hemos llegado muchas veces pero no sólo los remates que han abortado sino las manos que ha sacado el portero. Han sido muchas situaciones que tenemos que mejorar pero es fácil decirlo, hay que estar dentro del terreno de juego con 43 o 44 grados. Esta película no se ha acabado, quedan 96 minutos».

El 0-0 de cara a la vuelta, «es un resultado normal en play-off y si alguien pensaba que iba a ser un partido de muchos goles...hemos quedado 0-0. Todo se decidirá allí, es un campo difícil, más pequeño que este y para ascender hay que superar este tipo de situaciones y ganará el que mejor haga las cosas». Las claves, «no cometer errores. Nosotros tenemos equipo para hacer daño. Se decidirá por el que esté más acertado defensiva y ofensivamente».

MUCHAS FASES / Mientras, Eduardo Arévalo, entrenador del Calahorra, dijo que hubo “varios mini partidos dentro del partido total. Al principio estuvimos igualados de tú a tú y con pocas ocasiones». Resaltó que a su juicio «hubo una acción clarisima de penalti a Satrústegui. No sé si tienen algo contra nosotros pero es penalti y expulsión y no hay derecho». Y reconoció que «en la segunda parte en el tramo final el Badajoz ha sido superior y ha merecido ganar por ocasiones, llegada e insistencia. Primera de mucha igualdad y segunda mejor ellos. Sabíamos que ellos tenían un juego muy directo, segundas jugadas y caidas y ahi no podíamos cometer errores. Llevan a los equipos a zonas donde pueden robar y salir y son mortales. No podíamos cometer ningún error, es una eliminatoria de pocos errores. Al final nos ha faltado calma y paciencia para haber hecho alguna ocasión. A mis jugadores les doy un 10, esfuerzo máximo y eliminatoria al 50 por ciento y todo por decidir. Con el 0-0 a ellos les valen dos resultados y a nosotros uno, y no he venido a firmar el 0-0».

Y en el terreno de juego, Juan Ramón Ruano, se mostró serio pero confiado en ascender en Calahorra. El extremo de Usagre resaltó que «visto cómo ha transcurrido el partido nos vamos con un poquito mal sabor de boca por las ocasiones, sobre todo la última mía, en la que me ha hecho una gran parada. Le he pegado con el alma y me ha hecho un paradón. Mis compañeros me dicen que el portero no ha visto el balón y ha sacado la mano como acto reflejo. Suerte por su parte o acierto pero no ha podido ser gol y es una pena. Ahora iremos a Calahorra a pelear y a hacer un gol. El resultado está vivo».

COMPARACIONES / Ruano subraya que «defensivamente son mejores que los otros dos rivales pero ofensivamente el Bergantiños es mejor. En su casa tendremos que ponernos el mono de trabajo porque son competitivos, guerrilleros, van a las segundas jugadas y saben jugar su fútbol. Tendremos que poner nuestras armas y tengo buenas sensaciones para la vuelta. Estoy muy orgulloso y alabo a la afición que nos ha apoyado en todo momento. Ya hay que pensar en la vuelta en Calahorra lograr un resultado que nos de el ascenso», resaltó.

Del partido del próximo domingo, Ruano piensa que «ellos al espacio no trabajan mucho y será un partido de guerra pero eso se nos da bien, fuera de casa e iremos a por el gol que nos de el ascenso. Hemos metido 4 goles fuera de casa y con uno que marquemos se les va a complicar mucho. No nos vamos a guardar nada e iremos a por el ascenso».