Rafael Nadal entró cansado en la pista central del Qi Zhong Stadium de Shanghái, pero no se notó. «Ayer me quedé hasta las tres de la madrugada viendo en directo lo que sucedía en el Parlamento de Catalua», confesó a los periodistas. El número 1 del mundo no puede quitarse de la cabeza una situación que califica de «triste», aunque no se quiso extender: «Ya he expresado mi opinión dentro de la medida de posible, con lo complicado que es el tema, porque diga lo que diga se malinterpreta por los dos lados». Y acabó: «Simplemente espero que se solucione el tema, para mí esto es lo único prioritario, y yo soy solo un espectador de lo que está ocurriendo».

Pero, aun cansado y preocupado, prosiguió su camino para intentar acabar el año como número 1, logrando su 13ª victoria seguida, al ganar en su debut en el Masters 1.000 de Shanghái al joven estadounidense de 21 años y 52º del mundo Jared Donaldson. En su primer enfrentamiento directo, se impuso por 6-2 y 6-1 en menos de una hora (54 minutos) y ya está en octavos de final del torneo chino, donde se medirá hoy con el italiano Fabio Fognini.