Rafael Nadal no volverá a jugar hasta Wimbledon, que comienza el próximo 22 de junio y donde defiende el título. El número uno del mundo anunció ayer su baja en el torneo de Queen´s, en el que también fue campeón el año pasado, y donde iniciaba habitualmente su preparación sobre hierba. El mallorquín arrastra molestias en las rodillas y, desde que fue eliminado en los octavos de final de Roland Garros el pasado domingo frente a Soderling, ha optado por retrasar su retorno a las pistas. No quiere que vuelva a pasar algo así.

"No es ningún secreto que en los últimos meses he tenido molestas en las rodillas que no me han permitido estar al 100%. Necesito trabajar con mi equipo para recuperar mi condición física y estar lo mejor posible cara a Wimbledon. Espero que la organización y el público de Queen´s lo entiendan y me inviten el próximo año", anunció a través de su página web. Nadal viajará el lunes a Barcelona para pasar una revisión médica y después tendrá un nuevo ciclo de descanso en su casa de Manacor, ya con la hierba inglesa en mente.