Rafael Nadal, primer favorito, debutó con éxito en el Masters 1000 de Shanghái al vencer por segunda vez en dos semanas al estadounidense James Blake, pero Fernando Verdasco hizo las maletas prematuramente para Las Vegas al caer ante el croata Ivan Ljubicic.

Consciente de que la pasada semana ya le derrotó en la segunda ronda del Master 500 de Pekín, Nadal selló su paso a los octavos de final, con una sólida y trabajada actuación ante Blake en dos horas y 12 minutos, por 6-2, 6-7 (4) y 6-4.

Así, habrá un duelo español en los octavos y un cuartofinalista ya asegurado, pues Nadal se enfrentará ahora con Tommy Robredo, que ayer venció al alemán Florian Mayer, por 4-6, 7-6 (10) y 6-4, después de salvar tres bolas de partido.

Nadal llegó a Shanghái después de caer en las semifinales de Pekín ante el croata Marin Cilic, pero en su primer partido en la capital económica de China ha demostrado una gran puesta a punto. Su saque parece dispuesto y la muñeca del zurdo de Manacor imprimió hoy una gran velocidad para poner la bola en juego, en un partido en el que solo cedió su servicio dos veces y conectó seis directos.

La gran actuación de Nadal no se vio acompañada por la de Verdasco, que manejado por la experiencia del veterano croata Ivan Ljubicic, 37 del mundo, cayó por 6-4 y 7-6 (6) en un partido que el propio jugador calificó de extraño.