En el Mérida hay tranquilidad de cara al derbi con la excepción del disgusto que tiene Raúl Bernabéu. El portero suplente fue expulsado el pasado domingo cuando estaba en el banquillo durante el partido ante el Extremadura y su sanción por insultar al árbitro, el andaluz Raúl Chavet García, ha sido de cuatro partidos de suspensión. «Me siento triste, decepcionado, desilusionado», comenta. Su versión es que el colegiado se dirigió a los reservas «gritándonos que se caga en nuestra puta madre» y que él lo único que hizo fue «decirle que me hablara con respeto y que estuviera tranquilo».

Añade el futbolista de Orihuela que «es lamentable que haya árbitro así, que hagan y deshagan a su manera, que inventen conforme a ellos les plazca y que se dirijan hacia nosotros con esos modales». También pide que «se tomen medias contra estos árbitros, sabiendo que no es la primera vez que ocurre con ellos».