ESPAÑA: Casillas, Sergio Ramos, Pablo (Juanito, m.85), Puyol, Antonio López, Albelda (Xabi Alonso, m.46), Senna (Xavi, m.46), Cesc (Iniesta, m.68), Raúl (Luis García, m.62), Torres y Villa (Reyes, m.46).

EGIPTO: El Hadari, Barakat (Fathi, m.64), Gomaa, Nahas, El Sakka (Ali, m.64), Abdrabu, Shawki, Wanhab (Mosalam, m.76), Hasan, Nabi (Hamza, m.84) y Terika (Gaafar, m.84).

GOLES: 1-0, m.12: Raúl. 2-0, m.56: Reyes.

ARBITRO: Mattero Simone Trefoloni (ITA). Mostró tarjeta amarilla a Senna y Albelda por España y a El Saka por Egipto.

INCIDENCIAS: Amistoso de preparación.

España mostró una mejor imagen en el segundo partido de preparación antes del Mundial, ante Egipto, en un partido en el que, pese a tener lagunas en su juego en algunas fases del partido, el equipo nacional español exhibió una mejor circulación de balón que en el primer ensayo ante Rusia, lo que unido a los dos goles que marcó le dieron la victoria por 2-0.

Luis Aragonés dispuso sobre el campo un once con un sólo cambio con respecto al partido del pasado fin de semana: la anunciada entrada de Raúl González por Luis García, mientras que el resto repetía con el mismo dibujo del 4-3-3.

España transmitió mejores sensaciones en el inicio que en Albacete. La fluidez con la que viajaba el balón en el centro del campo y la conexión con los puntas fue notablemente superior que en la primera de las pruebas pre-Mundial.

Un fuerte disparo desde fuera del área de Antonio López no pudo ser atajado por el guardameta El Hadari y el balón rechazado fue cazado por Raúl para abrir el marcador al poco de superarse los diez minutos de partido.

TRANQUILIDAD Sin embargo, el gol varió el panorama. España con el paso del tiempo perdió fluidez y permitió al equipo de Hassan Shehata que llegase a las inmediaciones del área de Iker Casillas, aunque la firmeza defensiva del equipo español evitó trabajo a su guardameta.

La falta de creatividad en el centro del campo se tradujo en el segundo tiempo en la entrada de Xabi Alonso y Xavi Hernández que ocuparon el puesto de David Albelda y Marcos Senna. Además, el tercer cambio en bloque en el descanso fue el de José Antonio Reyes por David Villa.

Precisamente Reyes asumió pronto un gran protagonismo en el partido, al ejecutar magistralmente un lanzamiento de falta directa que supuso el segundo gol español.

España recobró la alegría y frescura en su juego. Con Xabi Alonso por el medio y Xavi y Cesc a su lado el combinado nacional impuso su ley en la línea de creación.

Las llegadas a la meta rival comenzaron a sucederse. La circulación del balón en el equipo español fue una de las notas más destacadas de la segunda parte, una labor a la que también contribuyó Andrés Iniesta, que reemplazó a Cesc Fábregas.

En el último cuarto de hora Egipto puso por fin a prueba a Iker Casillas, aunque el portero español resolvió con un portentosa intervención un peligroso remate de cabeza del activo Abdrabu y otra brillante parada a otro lanzamiento desde fuera del área de Ali.

Sin embargo, España, salvo estos dos sobresaltos, se mantuvo firme en su juego defensivo y además en la recta final del choque gozó de ocasiones para marcar, con una actuación destacada en este apartado para Luis García.