El Villanovense aguarda con expectación la disputa de su primer derbi regional en esta temporada. Su rival será el Cacereño, y aunque en la actualidad no atraviesa un buen momento ya que cierra la tabla tras haber sacado un punto de quince posibles, en el seno del conjunto serón no genera ningún tipo de confianzas.
Así lo manifiesta el presidente del Villanovense, Tomás Cordero, que hubiera deseado recibir al Cacereño en otra situación: "Lo deseable es que el Cacereño hubiera llegado más sobrado, pues sabemos que tiene un buen equipo y algún día tiene romper esa mala racha. Esperamos que el domingo no lo haga".
Para el choque ante el conjunto cacereño no se establecerá jornada económica, a pesar de ser un equipo que siempre genera buenas taquillas.
POLEMICAS OLVIDADAS
En este sentido, Cordero también ya da por zanjadas viejas polémicas con la directiva del Cacereño, surgidas hace dos temporadas por la polémica victoria que arrancó el equipo de Cáceres gracias a un gol con la mano de Eneko y al mal recibimiento que tuvieron los directivos serones en el partido de vuelta en el Príncipe Felipe . Como indica Cordero, "las relaciones entre ambos clubs son correctas y lo importante es que nos volvemos a ver las caras en Segunda División B y no en Tercera como esa vez".
En otras de las cuestiones que está satisfecho el presidente serón es en la cifra de abonados, que ya sobrepasa los 730, más que su rival. Y lo más importante es que éstos no sólo son de Villanueva, sino de pueblos de toda la comarca como Don Benito, Campanario, Entrerríos, La Coronada o Zurbarán.
