DUNDEE: Zaluska, Dillon, Grainger, Wilkie, Dods, Flood, Feeney, Robertson, Daly, Gomis y Buaben. También jugaron: Robertson, Kovacevic, Sandaza, Swanson, Kenneth, Shala y Dixon.

BARCELONA: Valdés; Alves, Márquez, Martín Cáceres, Víctor Sánchez; Keyta, Crosas, Gudjohnsen; Pedro, Henry y Bojan. También jugaron: Pinto, Abraham, Piqué, Córcoles, Toure, Busquets, Vázquez, Messi, Eto´o y Jeffre.

GOLES: 91-0, min.24: Prince Buaben. 1-1, min.26: Henry. 1-2, min.54: Messi. 1-3, min.62: Eto´o. 1-4, min.76: Messi. 1-5, min.78: Messi.

ARBITRO: McDonald. Sin tarjetas.

El argentino Lionel Messi volvió a ofrecer un recital de fútbol en Escocia, donde en el segundo partido del FC Barcelona, contra el Dundee United, marcó un ´hat trick´ y salió ovacionado.

Messi volvió a bordar el mejor fútbol y de sus botas salieron las mejores jugadas, los pases más precisos y por ello arrancó los aplausos más enfervorizados de una afición escocesa que se lo pasó en grande y se entregó con el argentino.

Toda la tranquilidad de la que gozó el Barcelona en el primer partido contra el Hibernian se tradujo en este segundo choque contra el Dundee United en una incomodidad constante, especialmente en la primera parte. Con Keita, Gudjohnsen y Crosas en el centro del campo, el equipo no tuvo la frescura ni soltura para mover el balón.

En la zona de definición, Pedro, Henry y Bojan no ofrecieron tanta contundencia como cuando Messi intimidó el Dundee desde el primer minuto, con Alves cerca de él para asociarse.

A mitad de la primera parte, después de que Henry malograse una clara acción de gol en un uno contra uno ante el portero Lukasz Zaluska, el Dundee armó un contragolpe que contó con un grave error de Martín Cáceres en el intento de despeje. Su acción habilitó una carrera por la banda que acabó en un centro que el atacante Prince Buaben transformó en gol, tras un certero remate de cabeza cruzado.

En la acción siguiente, Henry subsanó un error reciente y tras aprovechar una indecisión de la defensa local, conectó dos disparos y el segundo acabó en gol.

En el segundo tiempo, Guardiola revolucionó el equipo con la salida de un Barça nuevo y con la salida de Messi. No tardó en desequilibrar el joven argentino, que en el minuto 54 deshizo la igualdad con un gran gol.

Eto´o, que también tuvo su momento con la consecución del tercer tanto, volvió a estar muy nervioso y fallón.

Fue a partir del cuarto gol, el segundo del argentino, cuando el espectáculo cobró su máxima magnitud. Todo lo que tocaba Messi, o acababa en gol o en jugada peligrosa. Messi marcó el cuarto tras una buena pared con Eto´o, y en el quinto sacó el máximo provecho de un balón suelo. Recordó al portero y batió sin oposición.